La esclava de Juana Inés
Enamorada de la posibilidad de descifrar lo que las letras dicen juntas, Yara sigue los pasos de la madre poeta. Acata las órdenes de las monjas del convento de San Gerónimo. Oye los consejos de la tornera. Pero sobre todo, se guía por el ímpetu, por ese fuego interno que deriva siempre en la entretenida insumisión.
Autor
El librero de Valentina opina:
Ignacio Casas